¿Se puede incluir el jamón ibérico en la dieta?
Uno de los fiambres más representativos de la cocina española es el jamón ibérico, un producto que se elabora de manera artesanal y natural y que es un manjar para los paladares más exigentes. Sin duda un tesoro gastronómico, que, consumiendo de manera adecuada, muy bien puede formar parte de la dieta mediterránea, ya que posee altos índices de ácido oleico, proteínas y propiedades cardiosaludables.
Jamón ibérico saludable ¿Cómo se logra?
Se trata de un producto que aporta excelentes beneficios en la dieta y, por lo tanto, a la larga en la salud, hoy en día es un gran aliado que no puede faltar en ninguna comida. Este jamón proviene de la carne de los cerdos de raza ibérica, que se caracterizan por tener una alimentación saludable a base de bellotas y hierbas, además se crían en las dehesas de países como España y Portugal con climas excepcionales.
Es así que, gracias al cuidado y buena alimentación, se potencian todas las propiedades del jamón logrando carnes rojas con alto contenido de ácidos grasos no saturados. Están los jamones ibéricos de bellota, a base de carne de cerdos criados en dehesas y con alimentación de recursos naturales; los jamones ibéricos de cebo de campo, a base de cerdos alimentados con bellotas; y los jamones ibéricos de cebo, que son propios de cerdos alimentados con piensos.
Proceso de curación: garantía de un producto saludable
Incluir el jamón ibérico en la dieta es ideal, ya que su curación es superior mediante una maduración lenta en bodegas, logrando así productos gourmet, llenos de sabor y texturas únicas. Es un contraste de buena crianza con alimentación natural y elaboración tradicional, aportando grandes beneficios al organismo.
Jamón ibérico en la dieta: beneficios
Estos fiambres elaborados artesanalmente son ideales para la dieta, contienen proteínas, vitaminas, hierro, vitamina E, selenio y aminoácidos esenciales, siendo un alimento cardiosaludable y poderoso antioxidante si se consume en porciones adecuadas. El jamón ibérico es considerado un alimento gourmet de muy alto en valor nutricional, además no engorda si se consume moderadamente.
¿A qué se debe el alto contenido de grasas insaturadas? La grasa proveniente del cerdo de raza ibérica tiene ácido oleico, la cual proviene de una alimentación a base de bellota y otros productos saludables encontrados en la naturaleza de las dehesas.
Los beneficios de su consumo son: previene las enfermedades cardiovasculares, ayuda en la fatiga deportiva, previene la anemia y reduce la ansiedad.
¿Cómo incluir el jamón ibérico en las comidas?
Hay muchas posibilidades para incluir el jamón ibérico en la dieta diaria, es fácil de consumir e incluir en el desayuno, almuerzo y cena.
En el desayuno:
- Incluir el jamón en una tostada artesanal con un chorrito de aceite de oliva.
- Tostadas con jamón ibérico, pero esta vez acompañadas de tomate o unos nutritivos huevos.
- Huevos rotos con jamón, acompañados de una buena dosis de frutas.
En el almuerzo:
- Mezclar unas lonjas de jamón con una deliciosa ensalada, un estilo gourmet que te encantará.
- Están también las alcachofas confitadas con jamón.
- Las sopas frías que tienen como punto final un mix de jamón en tiras.
En la cena:
- Unos exquisitos tallarines de calabacín con trozos de jamón ibérico, una cena fresca para las temporadas más cálidas.
- Un risotto con guisantes y jamón ibérico.
- Y mucho más fácil, una riquísima tortilla rellena con jamón ibérico, espinacas y queso.
Ahora ya sabes, el jamón ibérico es un alimento aliado en toda dieta saludable, consumiendo este fiambre de manera moderada sacarás partido de todos sus beneficios.